Diego urdiales superó con nota su debut en el coso "El Palio" de la localidad francesa de Istres. Ovación en su primero y oreja en su segundo en dos actuaciones marcadas por el sentido del temple, la despaciosidad y los cites sutiles para componer series en redondondo por ambos pitones en los que los muletazos calaban por su profundidad y pureza. También se dejaron de salida los de El Tajo y La Reina con el capote y el torero de Arnedo pudo estirarse a la verónica hincando el mentón y jugando la cadera así como en un quite por chicuelinas al que abría plaza.