Éstos son todos los microrrelatos finalistas que optan a ser el ganador del concurso y que a lo largo de las cuatro semanas que ha durado el mismo y atendiendo a las bases del concurso, han sido seleccionados para optar a conseguir la foto, en gran formato, sobre la que se ha inspirado su texto.
FINALISTAS 1ª SEMANA
PALIDECE EL ALBERO
Grita el silencio desde tus ojos, el miedo acuchilla el azogue.
No es justo derramarse en los relojes cuando la sangre galopa por las venas como si fuera látigo.
El cielo se queda pequeño para guardar tu suerte. No tiembla la lumbre de tu pulso, suenan los clarines de tu querencia, palidece el albero.
Son, las cinco de la tarde.
Rosa María García Barja
SUEÑOS CUMPLIDOS
Clavar la pupila al reflejo de un espejo que le devuelve los miedos venideros
Mientras se encomienda a la cruz que le acompaña indefectiblemente.
Sentir que el próximo cruce de miradas,
enfrentados en el ruedo que conforma su vida,
será el que atrapa todas las verdades.
Y todo porque ahora,
amortajado de elegancia,
es el momento de disfrutar,
en la previa a los sudores fríos que marcan los límites,
de la imagen que siempre deseó ver reflejada en ese espejo.
Raúl Guadián Delgado
CUENTA CONMIGO.
Regresa una vez más para que te cuente la historia del ser transparente que me provoca y desafía a mantenerme aquí, pácifico y sosegado.
Te relato el déjà vù del trance y la oportunidad.
Lo confirmo y sostengo. Empiezo:
Alegría, aflicción, soledad, chasco, ilusión, afición, clarín, timbal,...Satisfacción.
Cruz, cara, abanto, bravo, leña, primero en la terna o no hay quinto malo y al saber lo llaman suerte. Sombra, sol, plata, oro...
Miedo y valor.
Si no te ha dado vértigo, vuelve mañana. Te lo repetiré mil veces desde la parte opaca.
Tu,refléjate y deslumbra.
Nuria Rivas Santos
FINALISTAS 2ª SEMANA
REGALO DE CUMPLEAÑOS
El abuelo sopló las velas, después, listones y papeles coloridos cayeron al suelo. Finalmente, su nieto Rodrigo le extendió un sobre que abrió mientras los demás degustaban la tarta. La familia enmudeció al notar lágrimas silentes del patriarca.
- ¡Qué le has dado al abuelo!- sonó la reprimenda.
- Él me llevó a esa corrida, mamá, no es mi culpa. Dijo: “ya no quiero ver torear más”… y así pasó… quería darle una sorpresa…
Un silencio de respeto inundó el salón, Don Remigio lloraba y sonreía. Los cayos de sus manos acariciaban una y otra vez la testuz de Peleón.
Fabiola Flores López
EL URDIALES DE MÁRMOL
Los vuelos imantados a dos puntas de acero,
tiran de la bravura moldeada
y el corazón ya no bombea apresurado,
respira inerte para vivir y no perdérselo.
La Gravedad del momento hunde a plomo dos riñones de hormigón,
el pecho le ensoga el mentón y lo amarra,
y una mano toreando a la cintura sostiene todo con mimo,
no dejando que el Urdiales de mármol caiga.
La geometría imperfecta de las dos anatomías
revienta de pureza en el embroque,
no hay pulso, no hay toques,
sólo hay oro, cincel, eternidad y vida.
Alicia Mayoral Alves
EL DÍA DE LA PUERTA DEL PRÍNCIPE
El muletazo global, la embestida generosa y hasta la pinta del toro, pariente del caballo de un sioux, desmienten la bandera pintada sobre la puerta de toriles, que planta una garita fronteriza detrás del formidable derechazo.
El paisaje de algunas faenas, pendiente de subrayar coordenadas o patrocinar la desactualización de una plaza octogenaria, improvisa el lujo apátrida de todo lo que no es atrezzo. ¿Y la faena de su vida? Salió en un pueblo, contesta Camino. Y tantos Caminos y cuántos Urdiales, cuando el toreo se aparece, sale a limpio y confunde Sevilla con Alfaro.
Daniel Hernanz Rodríguez
SUEÑOS EN REDONDO
¿Quién tuviera tu muñeca infinita?
Para ejecutar ese pausado e ingrávido vuelo , en el instante en que tu docta energía se convierte en materia y tu largo muletazo en arte imperecedero .
¿Quién pudiera acariciar tu poderosa e inmarcesible muleta?
Acariciando sólo con las yemas , como emerge el resoplido del noble berrendo , con su hocico anhelando la frágil franela.
Vestido de grana y oro , en torero de fuego eterno. Quietud absoluta con tu seductor señuelo . regalando vida por muerte.
Juan A. Solano Martínez
FINALISTAS 3ª SEMANA
JUEGOS EXTRAÑOS
¿De qué se trataba este nuevo juego? No era algo que le hayan enseñado sus padres.
Todo era tan extraño, un hombre de curiosas ropas se inclinaba a mostrar respeto y actitud retadora. ¿De qué trataba? ¿Qué debía hacer?
Estaba nervioso, era como un sueño. Sí, eso era seguramente, porque lo único que recordaba era el momento cuando se recostó a dormir. Y el suave beso de mamá.
Alejandro Valles Linares
A TI NUESTRO TÓTEM
Dame un respiro, una pausa, y aquí, ante estos tendidos poblados de aficionados y sobre este oscuro albero, postrado ante ti, templando tu poder y fijada mi mirada en tus defensas, permíteme mostrarte mis respetos y admiración. Sentimientos estos, compartidos por la afición, sentimientos que provocan emociones, emociones surgidas al presenciar momentos como los aquí vividos contigo como protagonista, apreciando tu codicia, bravura y poder, ser templados en interminables naturales, momentos que hacen de este arte algo épico. Pero basta de palabras, continuemos nuestra lucha, el poder de mi toreo, frente al poder de tu casta.
Fernando Moreno Cubero
AGUJA SOBRE AGUJA
Los miedos, los esfuerzos, los sudores…
Anhelos que conforman el camino de las huellas borradas.
Por eso ahora,
en el lugar donde de nada sirve correr para dejar atrás las penas,
donde las miradas enfrentadas
recorren el espinazo para sentir el respeto mutuo,
donde residen los sueños cumplidos…
El maestro sabe que se encuentra
en el lugar donde siempre quiso estar
a la hora precisa de soñar de nuevo.
Raúl Guardián Delgado
FINALISTAS 4ª SEMANA
CLAROSCURO
Juan Carlos Huertas Ayuso
SUDOR Y ALBERO
Se encontraba vacío y a sabiendas de lo que le faltaba comenzó a crear con sus manos como si de un gran artesano se tratase. Con templanza, el amor a una forma de vida y la bravura se fundieron en una trincherilla para romper el silencio de la soledad del campo. No hubo respetable que levantara un pañuelo que condecorara el triunfo y así, aferrado al arte del toreo más puro, solo vió alzarse el polvo y la pasión.
José Víctor Líndez Alonso
CON EL OCASO.
Y un día, muchos años después, cuando los reflectores y aquellas miles de gargantas que llegaron a corear su nombre se habían apagado, él todavía podía cerrar los ojos y recordar cómo se sentía estar frente al poderoso dios de la tauromaquia y haberlo dominado.
En una vibrante trincherilla hizo patente su dominio frente a la majestuosa fiera que se entregó, sin remedio, al hombre que la llevó a placer prendida a las telas.
Cada ocaso evocaba esa imagen, cada atardecer podía cerrar los ojos y volver a sentirse torero.
Laura Rosales
ABUELO ¿QUÉ HACEN?
Abuelo, ¿Qué hacen?
Bailan con la suerte.
¿Y quién ganará?
La muerte, solo la muerte
¿Eso es torear?,- dijo el niño contemplando la foto.
Eso, hijo mío es la vida
Elba A. Cabo Álvarez